Brasil busca ser el primer socio en el "nuevo momento" de Cuba
Cuba y Brasil reforzaron sus nexos políticos y económicos durante la visita del canciller brasileño Celso Amorim, que concluye este sábado, en la que trabajaron para reducir la brecha comercial y aumentar inversiones en áreas como petróleo, minería y turismo.
Las dos jornadas estuvieron dirigidas a concretar acciones de los 10 acuerdos suscritos por el presidente Luiz Inacio Lula da Silva en su visita de enero, que colocarán a Brasil como décimo socio comercial de Cuba a nivel mundial y segundo a nivel de América latina.
El vicepresidente cubano Carlos Lage acogió el "reto" -lanzado por Amorim- del interés brasileño de convertirse en "el primer socio de Cuba" a nivel general, lugar que ocupa Venezuela. "Estamos favorablemente dispuestos a este objetivo", señaló Lage.
"Cuba está abriendo una nueva fase de su desarrollo, de su evolución, y Brasil quiere estar ahí. Queremos ser el socio número uno, no el segundo ni el tercero", dijo Amorim.
Los principales acuerdos suscritos por Lula con el gobernante Raúl Castro en enero versan sobre exploración de petróleo, fabricación de lubricantes, créditos para importar alimentos y modernizar una planta de níquel en Moa (este); y fomento del cultivo de soja y la piscicultura.
En una reunión este sábado en el Palacio de las Convenciones, presidida por Lage y Amorín, el ministro de Comercio Exterior cubano Raúl de la Nuez dijo que el comercio continúa creciendo, pues alcanzó más 450 millones de dólares en 2007 y creció 58% de enero a abril de 2008.
Ello de debe a "mayores importaciones de alimentos, maquinarias agrícolas y equipos de transporte" por parte de Cuba, aunque comienza "un crecimiento de las exportaciones cubanas a Brasil", particularmente de las industrias biotecnológica y farmacéutica, dijo.
En 2006, cuando el comercio fue de 453 millones, las ventas cubanas sólo fueron de unos 25 millones, según la Oficina Nacional de Estadísticas.
De la Nuez señaló que además de las ventas cubanas de zeolita a Brasil "se abren perspectivas con otros minerales".
"Tenemos esperanzas de que aumente la exportación de servicios de Cuba, específicamente los servicios turísticos" para lo cual comenzará a funcionar en junio una ruta aérea La Habana-Rio de Janeiro, afirmó.
Amorin inauguró el viernes una ronda empresarial de ambos países, suscribió un acuerdo de colaboración para el cultivo de soja en Cuba, y sostuvo conversaciones con su homólogo Felipe Pérez Roque además de visitar al presidente del Parlamento, Ricardo Alarcón.
Previo a la visita del canciller, las instituciones bancarias de ambos países fijaron los términos de los créditos concedidos por Brasil.
Según Amorim, los nuevos créditos -inicialmente por 150 millones de dólares- "están siendo trabajados" y pueden llegar a "600 millones en varios años".
"La parte alimentaria se está trabajando muy bien, hubo un aumento muy grande de los límites de crédito, al mismo tiempo estamos trabajando con créditos para productos industriales y de servicios, maquinaria agrícola, también para la construcción de carreteras", dijo.
"Creo que todo eso va a estar listo en dos o tres semanas", añadió.
Pedro Alvárez, presidente del monopolio estatal cubano Alimport, dijo a la AFP que "las relaciones con Brasil son excelentes".
"Tenemos unas compras con Brasil este año cercanas a los 250 millones de dólares que incluyen complejo de soja, harina, aceite de soja, productos cárnicos", afirmó.
Fuentes cercanas a las conversaciones dijeron que se registraron avances para que Brasil se incorpore a la búsqueda de petróleo en las aguas cubanas del Golfo de México.
Cuba y Brasil reforzaron sus nexos políticos y económicos durante la visita del canciller brasileño Celso Amorim, que concluye este sábado, en la que trabajaron para reducir la brecha comercial y aumentar inversiones en áreas como petróleo, minería y turismo.
Las dos jornadas estuvieron dirigidas a concretar acciones de los 10 acuerdos suscritos por el presidente Luiz Inacio Lula da Silva en su visita de enero, que colocarán a Brasil como décimo socio comercial de Cuba a nivel mundial y segundo a nivel de América latina.
El vicepresidente cubano Carlos Lage acogió el "reto" -lanzado por Amorim- del interés brasileño de convertirse en "el primer socio de Cuba" a nivel general, lugar que ocupa Venezuela. "Estamos favorablemente dispuestos a este objetivo", señaló Lage.
"Cuba está abriendo una nueva fase de su desarrollo, de su evolución, y Brasil quiere estar ahí. Queremos ser el socio número uno, no el segundo ni el tercero", dijo Amorim.
Los principales acuerdos suscritos por Lula con el gobernante Raúl Castro en enero versan sobre exploración de petróleo, fabricación de lubricantes, créditos para importar alimentos y modernizar una planta de níquel en Moa (este); y fomento del cultivo de soja y la piscicultura.
En una reunión este sábado en el Palacio de las Convenciones, presidida por Lage y Amorín, el ministro de Comercio Exterior cubano Raúl de la Nuez dijo que el comercio continúa creciendo, pues alcanzó más 450 millones de dólares en 2007 y creció 58% de enero a abril de 2008.
Ello de debe a "mayores importaciones de alimentos, maquinarias agrícolas y equipos de transporte" por parte de Cuba, aunque comienza "un crecimiento de las exportaciones cubanas a Brasil", particularmente de las industrias biotecnológica y farmacéutica, dijo.
En 2006, cuando el comercio fue de 453 millones, las ventas cubanas sólo fueron de unos 25 millones, según la Oficina Nacional de Estadísticas.
De la Nuez señaló que además de las ventas cubanas de zeolita a Brasil "se abren perspectivas con otros minerales".
"Tenemos esperanzas de que aumente la exportación de servicios de Cuba, específicamente los servicios turísticos" para lo cual comenzará a funcionar en junio una ruta aérea La Habana-Rio de Janeiro, afirmó.
Amorin inauguró el viernes una ronda empresarial de ambos países, suscribió un acuerdo de colaboración para el cultivo de soja en Cuba, y sostuvo conversaciones con su homólogo Felipe Pérez Roque además de visitar al presidente del Parlamento, Ricardo Alarcón.
Previo a la visita del canciller, las instituciones bancarias de ambos países fijaron los términos de los créditos concedidos por Brasil.
Según Amorim, los nuevos créditos -inicialmente por 150 millones de dólares- "están siendo trabajados" y pueden llegar a "600 millones en varios años".
"La parte alimentaria se está trabajando muy bien, hubo un aumento muy grande de los límites de crédito, al mismo tiempo estamos trabajando con créditos para productos industriales y de servicios, maquinaria agrícola, también para la construcción de carreteras", dijo.
"Creo que todo eso va a estar listo en dos o tres semanas", añadió.
Pedro Alvárez, presidente del monopolio estatal cubano Alimport, dijo a la AFP que "las relaciones con Brasil son excelentes".
"Tenemos unas compras con Brasil este año cercanas a los 250 millones de dólares que incluyen complejo de soja, harina, aceite de soja, productos cárnicos", afirmó.
Fuentes cercanas a las conversaciones dijeron que se registraron avances para que Brasil se incorpore a la búsqueda de petróleo en las aguas cubanas del Golfo de México.