Hoy después de varios meses
ausente de este lugar
vuelvo para denunciar
a la injusticia indolente
que deje de castigar
a todo un pueblo inocente.
He caminado las calles
callejas de de la ciudad
y observe cada detalle
y la triste realidad
dura pero irrefutable
La Habana no aguanta mas.
Inhumana humanidad
que observando desde afuera
vierte un herrado criterio
conciente de su ceguera
ignorando el cementerio
de una ciudad casi muerta.
Destrucción y suciedad
abandono y negligencia
cadáver sin voluntad
guarida de la inconciencia
paraíso de impunidad
olimpo de delincuencia.
Que venga la providencia
con una orden celestial
y haga un pacto con la ciencia
definan cual es el mal
que hace vivir en la inercia
a un pueblo bajo anestesia
que no logra despertar.
W.Randal