Resulta facil hizar una bandera
reflejando intolerancia y rebeldia
en una tierra distante de la mia
existiendo de por medio una frontera.
Estos actos de llamados a la guerra
me parecen tristemente una ironia
como es posible salir de nuestra tierra
en un acto de valor por cobardia.
Que penosa resulta nuestra vida
cuando buscamos condicion de ciudadano
en cualquier nacion desconocida
queriendo renunciar a ser cubanos.
Somos varios millones de seres renegados
con suspiros de nostalgia, lloriqueando
añorando regresar al suelo amado
sin perder un pelo por lograrlo.
Algo tendremos que perder en realidad
porque no se obtiene sin esfuerzos la victoria
algo hay que ofrecer para lograr la libertad
quizas haya que dar hasta la sangre por la gloria
si queremos regresar a nuestra tierra
y vivir con orgullo y dignidad.
W.Randal